Escritor, historiador, una persona muy directa, José Carlos Agüero Solórzano obtuvo el Premio Nacional de Literatura en la categoría de no ficción por su última publicación titulada “Persona” (FCE, 2017).
José Carlos Agüero nació en 1975, experimentó de primera mano el terrorismo de los años ochenta, decidió investigar acerca de este tema y escribir acerca de ello.
Este galardonado escritor estuvo en la Feria Internacional del Libro de Trujillo 2018 y conversó con Siente Trujillo.
Siente Trujillo: Ayer decías que te sentías un poco apenado por haber publicado “Persona”, tu último libro, que recoge el sufrimiento que padeció tanta gente en los 80. ¿Cómo ha sido el proceso para llegar a publicar esta obra?
José Carlos Agüero: Ha sido un proceso muy largo y tortuoso. No ha sido un libro fácil, pues no se trata de un juego, sino que intento recoger las historias que tanta gente me transmitió; historias muy duras, íntimas, sin solución, mucho sufrimiento, mucho daño. ¿Cómo hacer para luego para trasladarlas a cualquier género literario y salir satisfecho?, la verdad es que no es lo que me motiva.
¿Cómo ha sido el surgimiento del título “Persona”?
Estaba allí, dándole vueltas al título. Soy muy cinéfilo y le robé el título a Bergman; es una película extraordinaria, me parecía que era simple, concreta e iba al punto de lo que estaba tratando transmitir, es que finalmente cuando no queda nada de nadie, sino solo sus restos, es difícil de hablar del sujeto. ¿Qué es una persona finalmente?, sus huellas, lo que deja detrás, lo que nosotros queremos recordar, pues tras eso hay una indagación sobre lo que nos hemos acostumbrado tan fácilmente a decir… esto es un ser humano, tiene cabeza, cuerpo y extremidades; pero la verdad es que pudiera tener otro orden, porque la violencia ha demostrado que podría tener cualquier otro orden.
¿Cuántos casos recoges aquí?
Son muchas experiencias las que están contadas allí, algunas son familiares, otras son personales y de otras personas.
¿El libro está dividido por partes?
Si, está dividido. Creo que en siete secciones. Desde que escribí el libro, no lo he vuelto a leer. Fue duro hacer este libro. En todas las historias, más que conmover me interesa transmitir lo que significaron. Los significados de quienes conservaron los restos de sus parientes. De hecho, alguien tenía guardada una falange de su pariente.
¿Recibiste apreciaciones de tus familiares y amigos acerca del libro?
Estaba saliendo de un banco en Surco, en Lima, un poco distraído, cuando de pronto me agarraron de los hombros, una señora me dio un abrazo de la nada y me dijo: así está bien, sigue así, sigue así. Luego me fui pensando en eso, ¿sigue así, qué significa?. En un primer momento, lo más lógico es, sigue escribiendo. Sin embargo, escribo actualmente sobre cosas que son muy duras, sobre el sufrimiento familiar, no el mío. En realidad, no soy alguien que sufre demasiado. O escribo sobre lo que les pasó a otras personas: desgracias. Entonces, es raro el pedido de «sigue así». Algo así como, «eh sigue vinculado al dolor»; tal vez haya que descansar de esto también.
¿O tal vez quizá intentó decir, sigue denunciando?
Si lo tomo por ese lado, también. Aunque me parece gracioso, es como decir, oye sigue sufriendo.
¿Qué les puedes decir a los lectores de esta última publicación “Persona”?
Que se aproximen al libro con curiosidad, pero con ojos críticos. No es un libro para tener razón, es un libro imperfecto, es más, creo que es un proyecto fracasado. Me planteé algunas preguntas que no pude responder; pero a estas alturas de mi vida, no me parece que este mal compartir el fracaso; no debo tener todas las respuestas, mejor comparto lo que encontré y así pensamos juntos.
Eres historiador de profesión, estudiaste en San Marcos. ¿Qué recuerdos tienes de tu vida universitaria?
San Marcos, cuando ingrese en los años ’90, estaba en un proceso complejo, acababa de ser intervenida por el gobierno de Fujimori. Había un cuartel militar adentro y estábamos bajo constantes medidas de seguridad. Fue un momento difícil de la universidad, pero le tengo un gran cariño. San Marcos es un mundo, un laboratorio complejo, es un resumen del país, viene gente de todas las regiones, no solamente de Lima, gente de muchos estratos sociales; pero sobre todo gente muy talentosa que no tiene plata para pagar una universidad privada. Agradezco mucho que haya una universidad nacional tan buena, como San Marcos.

¿Próximamente piensas escribir algún libro, que se viene para ti?
Un poemario, espero que para el próximo año. Me demoro mucho corrigiendo poemas. Tengo ya tres poemarios, el próximo año espero que salga el siguiente, es mi deseo; pero es lento el proceso de corrección. Además, espero terminar un ensayo para fines de año y que sea publicado a inicios del siguiente, el cual será una crítica a las celebraciones del Bicentenario.
¿Ya tienen títulos estas publicaciones?
En el ensayo, alguna de sus secciones, sino todo el libro, se llamará “Los hijos de la República”. Estamos en un momento de preparaciones para la celebración del Bicentenario, que me parece una celebración vacía, por lo menos como se está llevando a cabo y lo que intento transmitir son ideas fuerza acerca de por qué nuestra República ha fundado muchos ciudadanos llenos de vacío. Al hablar de los “Hijos del Bicentenario” o “Hijos de la República”, pensaba directamente en todos los hijos que surgieron producto de la violencia sexual, durante el conflicto armado, que son un montón, hijos de soldados, policías.
¿Cuál es la percepción que tienes de la actual política peruana?
Creo que lo que llamamos política peruana no existe, hay una serie de grupos de poder, sobretodo asentados localmente, que administran el uso de los recursos de los negocios lícitos e ilícitos y a eso le llamamos política, pues hemos llegado a una especie de pacto cínico entre todos, no importa que tengamos al frente a alguien que es un corrupto o directamente un líder de mafia -y lo sabemos-, pero como todos estamos de acuerdo en mentirnos unos a otros, le decimos «señor político». Estamos en ese nivel, un nivel muy profundo de descomposición.
¿Crees que en algún momento podamos salir de este nivel de corrupción?, ¿Qué se puede hacer?
Ante poderes no solamente corruptos, sino que son mafiosos y administran de manera abierta el poder de manera ilegítima. Creo que cuando el poder se convierte tan profundamente inmoral, pierde legitimidad y nosotros podríamos asumir una resistencia ciudadana activa no violenta, pero una resistencia, es constitucional.
¿Nunca has pensado participar directamente de política?
No hay política, cuando dos personas se sientan, uno es narcotraficante, otro es traficante de terreno; y arman un partido donde el candidato está denunciado por violencia sexual o crímenes directamente y se hacen campañas con dinero que vienen de las municipalidades y todos lo sabemos y finalmente votamos. Yo a eso no lo llamo política, lo llamo mafia. Y haré todo lo posible por no participar de ella.
¿Qué percepción tienes del terrorismo actualmente?
Sendero Luminoso como peligro armado para la gobernabilidad del país no existe hace desde hace muchísimos años, existe una pequeña columna en el VRAEM, que estuvo dirigida durante mucho tiempo por los hermanos Quispe Palomino, que antes brindaba servicio al narcotráfico y ahora directamente es mafia. Movadef y otras organizaciones que vinculadas a Sendero Luminoso y que están organizadas políticamente, no tienen dentro de su programa a mediano o largo plazo, hacer una nueva intentona armada. Lo dicen abiertamente, está en su programa, no nos están mintiendo, no es parte de su publicidad engañosa. No es un movimiento masivo, inclusive si llegara a participar en elecciones, yo y muchas personas más, trabajaríamos activamente para mostrar cuáles son sus grandes debilidades. Creo que Movadef es una organización política antidemocrática.
¿Acerca de tu padre que nos podrías decir?
Es una pregunta que tiene respuestas fáciles y difíciles… creo que mi padre es un tipo al cual hay que entenderlo en su contexto, en relación con sus pares, con su gente, con los valores que tenía en ese momento, la historia de la izquierda, sus valores, su militancia; y pese a todo eso, con su propia voluntad y su capacidad de decisión personal; qué lo llevó a tomar decisiones que generaron daño a mucha gente, deviene de él y su contexto. Yo sí lo recuerdo con cariño, pero no puedo dejar de pensar en todos los otros aspectos.
* Entre las publicaciones de José Carlos Agüero se encuentran:
– “Los rendidos. Sobre el arte de perdonar”. (IEP, 2015)
– El poemario” Enemigo” (Intermezzo tropical,2016)
– El conjunto de relatos “Cuentos heridos” (Lumen, 2017)
Entrevista de nuestra colaboradora Ana Belén Tongo Ramírez. Fotografías: Anthony Ibáñez Carranza.
Puedes encontrar más Peruanos del Bicentenario en Trujillo Beat.
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